DESIERTO DE LOS LEONES

Te gustaría un recorrido virtual. Imagina, un camino sinuoso en la montaña, a los lados árboles milenarios, siente el viento en tu cara, como se mueve tu cabello, percibe el aroma a hierba húmeda, el olor a pino, a tierra mojada.

Avanza por ese camino y te lleva a un paraje lleno de misterio, al fondo ves una construcción que data de hace 400 años, bien conservada, entra por el vestíbulo, pasas y te encuentras con jardines llenos de flores, al fondo hay un pasillo que puedes tomar hacia la derecha o a la izquierda, toma el de la derecha, ve recorriendo poco a poco, observa sus muros pintados de blanco, su techo abovedado, a los lados te encuentras unas celdas, espacios reducidos en dónde algún tiempo habitaron monjes , observa su precario mobiliario de madera, siente el frío de su silencio...más adelante hay otro patio central, inundado de rayos solares y una fuente al centro.

Del lado derecho en la esquina, hay una pequeña entrada, que te lleva por una escalera de piedra dos metros abajo, allí, la obscuridad te llena tu alrededor... conforme avanzas, no percibes ni tu mano, caminas por pasadizos, tocando los muros para no tropezar o caer, de repente hay una luz en un muro, que es por donde entra aire, sigue caminando y al final esta la salida y llegas a un oasis, un espacio grandioso con flores, árboles y paz....

Por un lado esta una vieja capilla, dónde se oficiaban los servicios religiosos, al otro extremo hay otro camino rodeado de vegetación. que te lleva a una capilla que se llama de los secretos, y todo este conjunto es EL DESIERTO DE LOS LEONES, enclavado en la parte poniente de la Ciudad, en la Delegación de Cuajimalpa.

Se puede llegar por la carretera libre a Toluca, a la altura de la caseta de la Venta, por la lateral, retornar en “U” y la primera desviación a la derecha, esa es la carretera que te lleva hasta el monasterio. El otro acceso es por la calzada Desierto de los Leones, que es la continuación de la calle Altavista en San Ángel, pasando Periférico inicia la avenida y hay que pasar por varias colonias, como Tetelpan, Alcantarilla, Rancho San Francisco, San Bartolo, Sta Rosa, pasando este último, ya estas entrando en la zona boscosa y de ahí en adelante es una carretera llena de curvas y es la que te lleva hasta el lugar. De hecho pasarás por el Km 31, tema de una película Mexicana.
Es una zona montañosa, alta y hay mucha humedad, te recomiendo que vayas abrigado.
Como atractivos hay varios, sobre todo para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre, además de visitar el monasterio, y disfrutar de sus jardines y arquitectura, hay visitas guiadas y una exposición de pintura permanente.
En las instalaciones del monasterio, hay un restaurante y servicio de sanitarios.
En los alrededores podrás veredear visitando algunas Ermitas que se encuentran a unos 300 m, puedes llevar comida para un día de campo, hay asadores, o hay muchos lugares de comida típica, desde las clásicas quesadillas, hasta comida un poco más sofisticada, como trucha, conejo o carnes asadas acompañadas de una buena cerveza o un vino tinto.
Hay dos cuotas que pagar, una es el peaje que lo cobran los lugareños para mantenimiento y reforesta, y el otro es el acceso al monasterio, aunque son cuotas muy bajas.